Algunas de las frases que nuestra madre nos decía de pequeños, y que de forma inevitable terminamos repitiendo en obra como aparejadores/as, arquitectos técnicos… en plena dirección de ejecución de obra:
«Porque lo digo yo, y punto«
Cuando hay que dejar algo por escrito en el libro de órdenes, tal cual le enseñó mamá.
«Como se caiga encima, cobran»
Cuando vemos algo mal hecho en obra y nos acordamos de aquel consejo maternal.
«Me vais a matar a disgustos»
Lo decimos mientras miramos la tabiquería terminada y las regatas recién empezadas.
«Esto no es el Banco de España»
Cuando el constructor empieza con las partidas alzadas y queremos ver partidas descompuestas y rendimientos claros.
«Y que no te lo tenga que repetir»
Coletilla infalible que funciona igual que en casa, pero ahora en el libro de incidencias.
«Te van a traer carbón los Reyes Magos»
Para quien insiste en no ponerse protecciones… la advertencia materna nunca falla.
«Que se le van las vitaminas»
Cuando hay que verter el hormigón con calma y cuidado, recordando que la prisa solo sirve para estropearlo todo.
«Si eres mayorcito para trasnochar, también lo eres para madrugar»
Especialmente útil para que acudan puntuales a la visita de obra.
«Ponlo recto que le va a salir chepa»
Cuando algo está torcido, la voz de mamá guía nuestra mano para enderezarlo.
«Pregúntaselo a tu padre»
Frase recurrente durante la fase de instalaciones, recordando quién realmente sabe (o cree saber).
«Un día cojo la puerta y me voy, y a ver cómo os apañáis sin mí»
Cuando nos planteamos parar la obra… pero sabemos que sin nosotros no puede seguir.
«Ya os acordaréis de mí cuando ya no esté»
Lo decimos al terminar una obra, para bien o para mal, ese responsabilidad tan nuestra.
«Como vaya yo y los encuentre«
Cuando no damos con los planos, memoria… en medio del caos de la obra.
«A ver si te entra en la cabeza»
Cuando el trabajador no entiende lo del casco y necesitamos un poquito de firmeza maternal.
«Que no me cuentes cuentos»
Cuando las mediciones no cuadran, recordando que mamá siempre tenía ojo clínico para las excusas.
«¿Tú te crees que el dinero crece en los árboles?»
Cuando el constructor pide más partidas o el cliente quiere extras “sin coste”.
«¿Y si tus amigos se tiran por un puente, tú también?»
Aplicable a quien argumenta simplemente con “en la obra siempre se ha hecho así”.
«A mí no me tiembla la mano»
Cuando toca firmar una paralización o rechazar un trabajo mal hecho.
«Tú sabrás lo que haces, pero luego no vengas llorando»
Frase preventiva antes de una chapuza anunciada.
«Mientras estés bajo este techo harás lo que yo diga»
Perfecta para cuando hay que recordar quién lleva la dirección de obra.
(*) Le he mandado el post a mi madre y me ha dicho que el «dibujito» está mal de escala (que ella es mas alta), que haga el favor de actualizarme ya (que este Autocad es muy antiguo), que viendo la barra de inicio no quiere ni imaginarse como tendré el escritorio de desordenado y es que…《 ¡Si no fuera por ella! 》♥️